Para seguir avanzando y mejorando en técnicas de estimulación cerebral no invasiva, asistimos recientemente a un congreso sobre Estimulación cerebral no invasiva en niños y adolescentes con trastornos neuropsiquiátricos: experiencias recientes y perspectivas de STIPED (Stimulation in Pediatrics).
El Doctor Salenhinejad, del departamento de Psicología y Neurociencia del Centro de Investigación de Leibniz, presentó los últimos resultados, aún no publicados, de la aplicación de tDCS en los principales trastornos del neurodesarrollo: trastorno por déficit de atención e hiperactividad, en autismo y en dislexia. En su presentación analizó las investigaciones publicadas hasta el momento, en las cuales se utilizaba estimulación de corriente directa en estos tres tipos de trastornos del neurodesarrollo, explorando los diferentes métodos, así como los resultados y la eficacia obtenidos. Igualmente, expuso la elevada tolerancia y pocos efectos secundarios de este prometedor método de tratamiento. Finalmente, propuso nuevas vías de investigación, como el cronotipo de la persona, para ajustar el tiempo de mayor eficacia para la aplicación de la estimulación.
Además, la Doctora Christine M. Freitag, del departamento de Psiquiatría, Psicosomática y Psicoterapia de niños y adultos de la universidad de Frankfurt, en su ponencia, presentó la evidencia de resultados positivos con la aplicación de tDCS en niños con diagnóstico de autismo. El tratamiento muestra resultados positivos en los síntomas nucleares del autismo, en la mejora de las habilidades de coordinación motora, en la memoria de trabajo y las funciones ejecutivas, así como en los problemas de sueño asociados y las habilidades relacionadas con la teoría de la mente, aspecto que guarda relación con la capacidad de interrelación con los otros. También expuso la elevada tolerabilidad del tratamiento, sin efectos secundarios relevantes.
Emily Jones, doctora perteneciente al departamento de ciencias psicológicas de la Universidad de Birkbeck de Londres, presentó las prometedores posibilidades del método de encefalografía como método diagnóstico en patologías como alteraciones del patrón de sueño, epilepsia o estados de coma así como herramienta para establecer biomarcadores de actividad cerebral que permitan predecir el grado de efectividad de la aplicación de los métodos de estimulación cerebral no invasiva. En la presentación expusieron los resultados con un primer marcador, el N170, que evidenció diferencias en su latencia en pacientes con autismo, pudiendo ser un biomarcador para el diagnóstico del trastorno de autismo.
Por su parte, la Doctora Christine Ecker, del departamento de Psiquiatría infantil y adolescente del hospital universitario de Goethe, presentó el desarrollo de posibles biomarcadores para predecir la respuesta individual a la aplicación de la estimulación cerebral no invasiva por corriente directa para mejorar el criterio de decisión clínica. Es una vía en desarrollo que permitirá poder valorar, con mayor seguridad, si habrá respuesta en el paciente así como diseñar métodos de tratamiento con tDCS específicos para cada persona y patología, incrementando la elevada eficacia de la tDCS como herramienta de tratamiento.
La Doctora Deny Menghini, de la Unidad de Neuropsiquiatría infantil y de adolescentes del Hospital Bambino Gesù en Roma, expuso los avances de la estimulación cerebral no invasiva en el tratamiento de la dislexia. La aplicación de tDCS en dislexia mejora las habilidades lectoras y semánticas en niños y adolescentes con dislexia. Estas mejoras comprobaron que se mantuvieron en el tiempo.
Desde el Instituto Neurocognitivo INCIA seguimos apostando por estas técnicas de estimulación cerebral no invasivas y aprendiendo del sector para poder ofrecer una mejor calidad de vida a nuestros pacientes.